Después de meses de reclamos y tras el paro nacional del último lunes que dejó vacías las aulas de más de 50 universidades públicas en todo el país, el Gobierno confirmó un aumento salarial del 7,5%para docentes y no docentes, que se pagará en tres tramos entre septiembre y noviembre.
El Ministerio de Capital Humano, a través de la Subsecretaría de Políticas Universitarias, informó que con los salarios de agosto se percibirá un anticipo del 3,95%. Además, el personal no docente recibirá sumas fijas excepcionales de $25.000 por cargo. En el caso de los docentes con dedicación exclusiva, también se asignará una suma fija de $25.000, proporcional para otras dedicaciones y cargos preuniversitarios.
La medida llega en un contexto de fuerte tensión presupuestaria y salarial. El paro del lunes, convocado por la Federación Nacional de Docentes Universitarixs (CONADU) y otras 25 organizaciones gremiales, se realizó bajo la consigna “Basta de salarios debajo de la línea de pobreza” y coincidió con el avance legislativo de un proyecto de ley que incrementa el financiamiento de las universidades.
“Con docentes y no docentes bajo la línea de la pobreza, no hay universidad posible”, señalaron desde CONADU.
El aumento, sin embargo, es considerado insuficiente por los gremios, que reclaman una recomposición real para recuperar el poder adquisitivo perdido en los últimos dos años y garantizar el funcionamiento de las casas de estudio.