El dólar mostró un fuerte repunte este miércoles, alcanzando los $1.237 en promedio para la venta en bancos, luego de que el gigante financiero JP Morgan aconsejara a inversores desarmar posiciones en el carry trade argentino, una estrategia que combinaba bonos en pesos con cobertura en dólares .
Desde abril, inversores, tanto locales como extranjeros, apostaban a la compra de Lecap y otros bonos en pesos atrayendose por tasas en pesos de más del 40 % anual, mientras convertían ganancias en dólares. Ese apetito por el carry trade impulsaba la estabilidad cambiaria.
Sin embargo, JP Morgan, en su informe del 27 de junio “Tomándose un respiro”, alertó sobre riesgos crecientes: caída de la liquidación agroexportadora, demanda de dólares por turismo (USD 3.500 M en el 1° trimestre), ruido político por las legislativas de octubre y menor robustez de reservas.
suba del dólar
- Mayorista: subió $17 (+1,4 %) a $1.222.
- Minorista: promedio de venta en bancos ascendió a $1.237,27, alcanzando hasta $1.265 en entidades privadas como Macro, Piano y Hipotecario.
- Dólares financieros: MEP escaló a $1.232,83 (+1,8 %), CCL a $1.233,08 (+1,9 %)
- Blue: se ubicó en $1.225, con aumento de $10.
“Un reciente informe de JP Morgan… sacudió los cimientos del mercado local… recomendar… desmantelar sus posiciones en el ‘carry trade’… reducir exposición a bonos en pesos y pasarse dólares”.
Medios locales como Perfil e iProfesional destacaron que JP Morgan adelantó su advertencia —prevista inicialmente para agosto— y advirtió que “preferimos dar un paso atrás” por la caída en la rentabilidad y el riesgo electoral.
Analistas alertan que, sin liquidación fuerte del agro y con elecciones en vista, la presión sobre el dólar podría mantenerse.
El llamado de atención de JP Morgan ha encendido señales de alerta: la desbandada del carry trade provoca presión sobre el tipo de cambio, generando subas tanto en el oficial como en los paralelos. En este entorno, los inversores están pasando a una postura más defensiva: liquidez, cobertura en dólares y contención del riesgo político y estacional.
El Gobierno y la autoridad monetaria se encuentran en un entorno delicado: deben mantener tasas atractivas en pesos, defender reservas y a la vez no ahondar la depreciación del peso. Con la mirada puesta en el segundo semestre, pocos descartan episodios cambiarios volátiles.