En una de las semanas más tensas para el oficialismo, la Justicia profundizó la investigación en torno a Diego Spagnuolo, titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS), con una serie de allanamientos que revelaron una red de presuntas coimas. El lunes por la noche, el funcionario intentó escapar en su vehículo, lo que terminó derivando en su detención mientras la policía le cruzaba el auto para impedir la fuga. Se le secuestró el teléfono y el incidente encendió aún más el escándalo político que ya sacude a la Casa Rosada.
El caso estalló cuando se filtraron audios atribuidos a Spagnuolo donde hablaba de coimas mensuales de medio millón de dólares por parte de laboratorios farmacéuticos cercanos a Karina Milei y los hermanos Menem, a cambio de contratos con el Estado. Estas revelaciones llegaron en el marco de una causa judicial que se inició tras una denuncia por defraudación, asociación ilícita, estafa y negociaciones incompatibles de Diego Spagnuolo, Karina Milei, Javier Milei y Martín “Lule” Menem, radicada por el abogado Gregorio Dalbón. El juez a cargo es Sebastián Casanello, con la fiscalía de Franco Piccardi al frente.
¿Por qué la fuga complica aún más al gobierno?
- Evidencia de peligro de fuga y obstrucción de la Justicia: El intento de escape en el vehículo refuerza el argumento de riesgo procesal, lo que podría facilitar medidas como prisiones preventivas o embargo de bienes.
- Impacto político demoledor: Este episodio acentúa la percepción de impunidad dentro del círculo íntimo de Javier Milei y alimenta los reclamos de renuncia o destitución por parte de sectores opositores.
- Sistemas de poder en crisis: Con el foco puesto sobre Karina Milei y los hermanos Menem como presuntos beneficiarios de las coimas, la cadena de responsabilidad alcanza niveles críticos dentro del gobierno