El dólar oficial marcó hoy una cotización de $1.480 para la venta, según fuentes del mercado y medios económicos nacionales. Esta nueva alza lo lleva a superar el techo de la banda de flotación que había sido establecido por el Banco Central (BCRA), entrando en territorio de máxima tensión cambiaria.
Qué significa esto para la economía real
Este salto del dólar tiene consecuencias inmediatas para quienes cobran salarios en pesos, afrontan pagos en dólares o están atados a tarifas reguladas que se mueven en función del tipo de cambio:
- Inflación presionada: el encarecimiento del dólar puntualiza directamente los precios de los productos importados, los fletes y las materias primas, lo que termina trasladándose al consumidor final.
- Poder adquisitivo disminuido: los salarios y prestaciones pierden terreno aceleradamente respecto de lo que cuesta adquirir bienes que dependen del dólar o de importaciones semielaboradas.
- Incertidumbre y desconfianza: cada vez que la moneda se deprecia en forma acelerada, muchas personas buscan refugio en divisas o activos reales, lo que genera mayor volatilidad y fuga de capitales.
Factores que impulsan esta suba
Algunas de las causas detrás de este nuevo pico:
- Déficit fiscal persistente: el gobierno de Milei afirma buscar un “déficit cero”, pero el ajuste aún no logra calmar los desequilibrios entre ingresos y gastos. La necesidad constante de financiamiento (y moneda extranjera) presiona al tipo de cambio.
- Limitaciones en reservas y mercado de divisas: la banda de flotación que administra el BCRA tiene un techo que hoy el dólar oficial está alcanzando o superando, lo que obliga al Banco Central a intervenir o emitir señales fuertes para contener la devaluación.
Qué podría anunciar el gobierno
Aunque todavía no se conocen todos los detalles, fuentes consultadas adelantan que el gobierno podría presentar:
- Medidas para contener el tipo de cambio, quizá mediante intervención directa del BCRA, regulación más estricta en el mercado de cambios o nuevos impuestos / retenciones al dólar “turista” o financiero.
- Ajustes fiscales adicionales: recortes, reasignaciones presupuestarias o, al menos, declaraciones de austeridad que apunten a calmar los mercados.
El dólar a $1.480 marca un nuevo récord nominal oficial que ya no sorprende pero sí alarma. En un país donde la inflación y el deterioro del salario real ya se sienten con crudeza, esta suba fortalece la percepción de que la crisis económica está lejos de amainar. Lo que viene dependerá en buena medida de las decisiones que el Ejecutivo pueda tomar en materia fiscal, cambiaria y de diálogo político, especialmente con las provincias y los sectores sociales que exigen al menos alivios urgentes.