El día posterior a la histórica medalla de bronce cosechada por los hermanos Tomás y Lucas Villegas en el relevo 4×100 de los Juegos Panamericanos Junior fue una jornada tranquila y cargada de alivio emocional. Habían alcanzado su meta, con la presea colgando del pecho y un nuevo récord nacional en la categoría, incluso superando a los adultos.
Ese bronce lo consiguieron junto a Tomás Mondino y Matías Castro, y marcaron un hito: por primera vez en los Panamericanos Junior, un equipo argentino de relevos logró medalla. Además, acabaron con una racha de más de cuatro décadas sin récord juvenil, quedando en 40.26 segundos —a apenas ocho centésimas de la plusmarca nacional vigente—.
Con el sudor fresco, Tomás aseguró que la carrera fue “muy linda, llena de emociones”: “Sabíamos que podíamos llegar a ganar alguna medalla y lo cumplimos. Hicimos mucho trabajo previo pero a la carrera la disfrutamos muchísimo”. Lucas, por su parte, confesó que la tensión fue intensa: “Estar ahí implicaba mucha responsabilidad… todo el tiempo que habíamos puesto terminó dando sus frutos”.
La actuación del equipo —integrado por una combinación de talentos puntanos, santafesinos y riojanos— encierra algo más que una medalla: es el resultado de un proyecto deportivo colectivo que apuesta al trabajo en equipo y al crecimiento sostenido.
